viernes, enero 22, 2010

La muela del juicio

Espero no retractarme al rato, pero mis primeras impresiones con respecto a la mítica sacada de las muelas del juicio me parece un tanto exageradas. No me hago el valiente nada más porque sí. La operación duele, como cualquier otra extracción. La encia queda un poco más lastimada que en otro procedimiento, pero tampoco es para morir.

Comí y no quedé con hambre. Chayote cocido y caldito de pollo. Suavecito, pero aquello de comer con popote durante una semana ¡baaah! sospecho que mi doctor es una reata.

En fin, lo que sí es que tengo el cachete inflamado. La verdad es que podría ponerles una foto mía en este momento para mostrarles mi cachete. No le encuentro sentido porque me encontré otro cachete que es igualito al mío ahorita. El de Kiko. Nada más quítenle la cara de imbecil y ese soy yo.

En fin, espero no tener que retractarme. Voy a descansar el fin de semana. Así que espero que EU no invada Chiquihuitán, o que Emilio venga a emborracharse al Nápoles, pa descansar agusto. Lo demás, bien puede esperar.

Por cierto que me contaron un chiste muy malo:

Imitación chafa de Teo González: "Güey, que te vas a volver loco y ya no podrás ser abogado".
Yo: ¿Por?
Imitación...: Pos porque perdiste el juicio. La muela del juicio...

Ah ya vámonos.

No hay comentarios.: