Hace un calor de la fregada. Ayer como fue dia no hábil mi familia fue a un balneario, pero había 500 personas en las albercas y decidí no entrar. Estoy empanzonado de agua y no se me quita ni el calor ni la flojera.
Ahi va la preparación para la carrera, luego de las albercas y de comer me fui a mi casa y de ahí a correr a Chiquihuitán, un pueblo que está como a 4 kilómetros y medio de Autlán, la ida y la vuelta o sea como 9 km, quizá menos, nadie sabe la distancia exacta hizo 40 minutillos. Pero me duele un poco mi dedo índice del pie derecho y me preocupa.
Cien Años de Soledad me tiene apesumbrado las primeras páginas son divertidas con todas las locuras de los Buendía, la narrativa es lindísima y quería conocer Macondo, luego el periodo de guerras, las citas de otros libros de Márquez, he tenido pesadillas con gente con cola de puerco.
Me preocupé por cosas bien pendejas. Pero recordé una frase de Noesh y la aplica: Las Divas no se despeinan. Nadie que me pregunte en público o en privado conocerá esas cosas.
Espero la liguilla para ver campeonas a las Chivas otra vez.
Ya terminé de trabajar por hoy. Así que ya me voy. Estoy triste porque quiero tomarme una cerveza y no lo haré por la carrera del domingo.
Les dejo una foto que no tiene nada que ver con nada.
